Iniciamos este 2021 con malas noticias sanitarias y con malas perspectivas para la economía. Después de la experiencia del año anterior ya deberíamos ser conscientes de que cada uno de nosotros, individualmente y colectivamente puede contribuir para mejorar la situación sanitaria, pero que en la mejora de las condiciones económicas, el factor fundamental, serán las políticas que se desarrollen desde los gobiernos y las instituciones.
Se ha cumplido ya un año de gobierno de coalición, del que Podemos forma parte. Nuestra influencia en las medidas adoptadas es más que evidente, sobre todo si las comparamos con la gestión de otros gobiernos en otros periodos.
El Ingreso Mínimo Vital, Garantizar los suministros esenciales, la Paralización de los desahucios, la Subida del SMI a 950 €, el Sistema de ERTE para proteger el empleo, las Ayudas a las y los autónomos, el Plan de contingencia contra la violencia de género, la Reducción de las tasas universitarias o el aumento de la cuantía de las becas, entre otras, son medidas que aumentan la protección social.
Con una renta media anual por persona de 11.680 € y con un riesgo de pobreza y / o exclusión social que alcanza el 25,3% de la población, según datos del 2019, no se hace nada difícil pensar que muchas personas necesitarán protección social. Pueden ser personas de nuestro entorno familiar o social, o quizás nosotros mismos.
Los que creemos firmemente que sin este tipo de políticas no hay futuro, seguimos trabajando, para desarrollarlas. Cuando cada uno de nosotros reflexione, desde nuestra responsabilidad, con el objetivo de incidir en quien queremos que gestione nuestros recursos en los próximos años, sobre qué futuro queremos para nuestros hijos e hijas, nuestros mayores o para nosotros mismos, lo deberíamos tener en cuenta, y votar a un partido que como Podemos no sólo habla. Trabajamos cada día para que todos y todas podamos tener una vida digna.

Regidor Podemos SJD